¿Por qué los dientes se vuelven amarillos? (1)

¿Por qué los dientes se vuelven amarillos? (1)

Varias cosas diferentes pueden afectar el color de sus dientes y volverlos amarillos.

Si bien las celebridades y las modelos pueden lucir dientes blancos perlados, las sonrisas de la mayoría de las personas son un poco más opacas. Pero esto no debería ser demasiado sorprendente. Muchas cosas pueden afectar el color de sus dientes y convertirlos en un temible tono amarillo, lo que puede hacer que algunas personas se sientan conscientes de su apariencia y duden en sonreír.

La mayoría de las causas de decoloración dental se dividen en dos categorías principales: manchas extrínsecas e intrínsecas. El amarillamiento también puede ser causado por una amplia gama de factores de salud, desde el uso de medicamentos hasta el cepillado inadecuado.

Manchas extrínsecas

Las manchas extrínsecas afectan la superficie del esmalte, que es la capa dura y externa de los dientes. Aunque el esmalte dental puede mancharse fácilmente, estas manchas generalmente se pueden quitar o corregir.

La causa número uno de la coloración amarillenta de los dientes es el estilo de vida: Fumar, beber café y té son las principales causas.

El alquitrán y la nicotina en el tabaco son sustancias químicas que pueden causar manchas amarillentas en la superficie de los dientes, en las personas que fuman o mastican.

Como regla general, cualquier alimento o bebida que pueda manchar la ropa también puede manchar los dientes. Por eso, los alimentos y bebidas de color oscuro, como el vino tinto, las bebidas de cola, el chocolate y las salsas oscuras, como la salsa de soja, el vinagre balsámico, la salsa de espagueti y el curry, pueden decolorar los dientes. Además, algunas frutas y verduras, como uvas, arándanos, cerezas, remolachas y granadas, tienen el potencial de manchar los dientes. Estos artículos son ricos en cromógenos, sustancias que producen pigmentos que pueden adherirse al esmalte dental. Los dulces son otros alimentos que pueden manchar los dientes.

Los alimentos y bebidas ácidos pueden promover las manchas al erosionar el esmalte dental y facilitar que los pigmentos se adhieran a los dientes. El tanino, un compuesto amargo que se encuentra en el vino y el té, también ayuda a que los cromógenos se adhieran al esmalte dental, lo que finalmente causa manchas. Pero hay buenas noticias para los bebedores de té: un estudio científico de 2014 descubrió que agregar leche al té reduce las posibilidades de manchar los dientes porque las proteínas en la leche pueden unirse al tanino.

Las formas líquidas de suplementos de hierro pueden manchar los dientes, pero hay varias formas de prevenir o eliminar estas manchas:

Prevenir o eliminar estas manchas:

No cuidar los dientes lo suficiente, como cepillarlos y usar hilo dental de manera inadecuada, y no realizar las limpiezas regulares puede evitar la eliminación de las sustancias que producen manchas y provocar una acumulación de placa en los dientes, lo que resulta en decoloración.

Manchas intrínsecas

Las manchas intrínsecas ocurren dentro de la estructura interna del diente, llamada dentina, lo que hace que estas manchas sean más difíciles de eliminar.

Numerosos medicamentos pueden causar manchas intrínsecas en los dientes. Si los niños toman los antibióticos tetraciclina o doxiciclina mientras sus dientes aún están en desarrollo (antes de los 8 años), sus dientes pueden volverse amarillentos. Las mujeres que toman tetraciclina después del cuarto mes de embarazo o durante la lactancia, pueden hacer que un niño tenga decoloración de los dientes de leche.

Durante la edad adulta, el uso de enjuagues bucales que contengan clorhexidina, un compuesto que puede reducir las bacterias y tratar la gingivitis (inflamación de las encías), puede causar decoloraciones marrones en los dientes. Además, la minociclina del medicamento contra el acné, un derivado de la tetraciclina, mancha los dientes.

Someterse a tratamientos de quimioterapia, así como a la radiación en la cabeza y el cuello, puede provocar manchas intrínsecas. Incluso algunos medicamentos relativamente comunes, como los antihistamínicos, los antipsicóticos y los medicamentos para la presión arterial a veces pueden amarillear los dientes.